31 de Julio de 2025
Implacable por Paty Herrera
Los mexicanos salen todos los días a ganarse preguntándose si volverán a casa después del trabajo. Madres y padres de familia se esfuerzan a diario por llevar el sustento, soportan muchas horas trabajando, y al final de sus jornadas vuelven con miedo de que alguien se atraviese en su camino y les robe el fruto de su esfuerzo, miedo de ser violadas, miedo morir en medio de la nada, miedo de desparecer y dejar en el desamparo a sus familias.
La maestra Irma Hernández Cruz, era una mexicana como tantas y tantos que se ven obligados a tener dos trabajos porque el dinero nunca alcanza.
Pagar impuestos, tarjetas de circulación, verificaciones, etc. Es algo que todo taxista conoce, pero qué pasa cuando para poder trabajar también debes pagar el cobro de piso, una cuota que te permita trabajar y sobrevivir en un país con una economía apunto de la recesión y un gobierno social rebasado por el crimen organizado.
La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, pertenece a una esfera social completamente diferente a la del mexicano promedio, pero los señalamientos de enriquecimiento ilícito, los presuntos tratos debajo del agua con SENER y los desarrollos residenciales de lujo en Tabasco y Veracruz a su nombre dejan en claro que clase de mujer es Rocío.
La ineptitud de la ex secretaria de Energía en el gobierno de AMLO la colocó en el centro de las críticas por el pésimo manejo del proyecto de la refinería de Dos Bocas, con sobrecostos superiores al 40% de lo presupuestado originalmente.
Su anterior frase “Aquí no hay crisis de seguridad, hay percepción manipulada” envejeció mal y cuando la muerte de la maestra Irma Hernández se convirtió en un escándalo nacional. La estupidez de Rocio Nahle salió a flote y siendo incapaz de manejar una crisis política escupió una frase que quedará para la historia:
“La maestra fue violentada y después de ser violentada sufrió un infarto. Les guste o no”.
La soberbia de está mujer, igual que la de Adán Augusto, Noroña, Andi López Beltrán, Lopez Obrador y la propia Claudia Sheinbaum, nos permiten darnos cuenta de que México es gobernado por políticos indolentes y arrogantes, que en su ignorancia han dejado a los ciudadanos en el más terrible desamparo.
Morena al igual que sus predecesores le apostará al olvido y la muerte de la maestra Irma Hernández será una cifra más en las estadísticas de los miles de mexicanos asesinados por el crimen organizado.
¿Dejaremos que esto siga pasando?… ¿Hasta cuándo permitiremos que nuestro país siga siendo rehén del crimen organizado y de la clase política?…
Que en paz descanse la maestra Irma Hernández Cruz y que su muerte no sea en vano como la de tantos buenos mexicanos.