
Implacable por Paty Herrera
La 4T cree que posee una rectitud y un honor imaginarios que defender y bajo esta premisa, Claudia Sheinbaum ordenó la renuncia Alejandro Gertz Manero al frente de la FGR, una de las vacas sagradas del oficialismo mexicano. Gertz Manero nunca destacó por tener casos emblemáticos ni por promover grandes cambios en la procuración de justicia.
Su historia comienza con la llegada de su abuelo Cornelius Gertz a nuestro país invitado por la empresa alemana Sommer. Cornelius Gertz prospera económicamente gracias a la usura y amasa una fortuna considerable que décadas más tarde le permitió a adquirir diversos puestos diplomáticos. Cornelius Gertz adoptó diversas nacionalidades, en especial la húngara, que conservó hasta sus últimos días.
No obstante, se ganó la enemistad de los presidentes Manuel Ávila Camacho y Miguel Alemán Valdez respectivamente, quienes intentaron desterrarlo y despojarlo de sus cargos. Debido a que diversos informes de Estados Unidos lo señalaron como un espía al servicio del partido Nazi y de Adolf Hitler.
Gertz Manero comenzó su trayectoria trabajando para Luis Echeverría liderando la operación Cóndor cuyo objetivo real más allá de combatir a los productores de marihuana, fue darle a Echeverría el control total sobre el ejército. Nunca tuvo un color ni ideología propios, siempre se vendió al mejor postor, formó parte de la izquierda, de la derecha, el PRI, el PAN y después de Morena al postrarse a los pies del “Rey del Cash” Andrés Manuel López Obrador.
Gertz Manero fue muy eficiente cuando se trató de perseguir y encarcelar a su excuñada Laura Morán Servín y a la hija de está Alejandra Cuevas Morán por el presunto asesinato de su hermano, algo que se convirtió en un escandalo nacional ya que Gertz Manero utilizó su poder e influencias para lograr su cometido.
Y como mencionamos, nunca logró procesar un criminal importante ni obtuvo una sentencia que marcara su legado. Si no todo lo contrario, uso su puesto para beneficiarse, traficando con información delicada de políticos y empresarios mexicanos y extranjeros. Se rumora que horas antes de su exilio forzado, el verdadero presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, buscó desesperadamente comunicarse con él.
Ante la negativa de Gertz Manero a volver a entablar un dialogo con el Mesías Tropical. Su destino fue sellado y lo obligaron a renunciar, endilgándole una embajada que nunca pidió, muy probablemente a Alemania, el país de sus ancestros. Su lugar será ocupado por Ernestina Godoy Ramos una gris y sumisa diputada suplente, que al frente de la FGR seguramente acatará todas las órdenes del Tartufo.
En política no hay casualidades y la reaparición del Capo de Macuspana a solo unos días del destierro de Gertz Manero, nos deja en claro quien es el hombre a cargo y quien realmente gobierna México.